Estamos rodeados de él, aunque para la mayoría de la gente pase desapercibido, nuestro mundo físico se construye con él. Hablamos de esas paredes y estructuras que nos albergan y protegen realizadas con hormigón proyectado.
El hormigón proyectado también es conocido como hormigón gunitado.
El hormigón proyectado o gunitado, más que un material, es un proceso. Puede aplicarse húmedo o seco y muestra propiedades endurecidas superiores al hormigón convencional de alta calidad, es decir, resiste más y mejor, dura más y filtra menos el agua.
Aunque las propiedades endurecidas del gunitado de hormigón son parecidas al hormigón blando convencional, la naturaleza del proceso de colocación del hormigón proyectado tiene una serie de ventajas y beneficios.
Las muchas ventajas del proceso de hormigón proyectado, son especialmente evidentes cuando se ven desde el punto de vista de la sostenibilidad medioambiental. A diferencia de muchas reivindicaciones medioambientales, que se basan en ideales políticos o sociales que a menudo son difíciles de medir y controlar, las ventajas de sostenibilidad del proceso del hormigón proyectado, afectan directa y positivamente a la parte económica de un proyecto, a las decisiones empresariales tradicionales, a la mano de obra y al ahorro de tiempo, así como a una mejor calidad de acabado.
- Ahorro de encofrado (esto es el armazón o revestimiento), una obra realizada con hormigón proyectado puede abaratar el proceso de encofrado entre un 50% y un 100 % si lo comparamos con un encofrado convencional.
- El encofrado no tiene que ser diseñado para presiones internas, es decir, mayor independencia para la acción.
- Las formas complejas requieren muy poco o ningún encofrado.
- Eliminación de grúas y otros equipos, ahorrando un importante coste económico.
- Ahorro de mano de obra, de al menos el 50 % en aplicaciones de reparación.
- Aumento de la velocidad de construcción, del 33% al 50 %.
- La velocidad de reparación reduce o elimina el tiempo de inactividad.
- Mejor adhesión al sustrato, lo que mejora la durabilidad.
- Adaptabilidad para reparar superficies que no son rentables con otros procesos.
- Capacidad para acceder a espacios restringidos y zonas difíciles de alcanzar, incluidas las aéreas y subterráneas.
Como podrá intuir, las ventajas del hormigón proyectado se extiende más allá del mero tiempo y dinero, lo que nos permite construir de manera experta paredes más largas y más altas que con otros sistemas, inviables por limitaciones de presión de junta, mamparo y cabeza.
Piscinas, túneles, tanques, muros…, prácticamente todo lo que nos rodea está vinculado a este proceso.
- Para reparación y restaurar. Puede ser utilizado para arreglar superficies de hormigón o estructuras de acero dañadas, que tengan algún modo de acceso. Puentes, edificios, estructuras marinas…
- Para construcciones subterráneas. Aunque normalmente se utiliza para la mayor parte de excavaciones de piedra, en ocasiones la usamos con éxito en el ascenso de túneles ya maltrechos, sin cohesión o suelos perdidos. Las aplicaciones típicas en el subsuelo son como suplemento o sustitución de los materiales de refuerzo convencionales. Cuando se construyen muros de contención de perímetro subterráneo convencionales, se gasta mucho tiempo y dinero en el proceso de conformación. El sistema de forma y lanzamiento del hormigón proyectado ahorra ambas cosas, como ya hemos visto anteriormente.
- Para proteger superficies y cuestas. Otro uso típico es como protección temporal de superficies rocosas deterioradas por su larga exposición a la intemperie. Estas deben ser drenadas correctamente, para prevenir daños causados por excesiva elevación y, su uso en vertederos u otras áreas de desperdicios, es beneficiosa para prevenir infiltraciones de agua en la superficie.
- Para crear nuevas estructuras. El hormigón proyectado no es necesariamente el método para reemplazar cualquier trabajo anterior, pero donde se combinan involucradas secciones estrechas y áreas grandes, puede ser muy útil. Estamos hablando de estructuras como piscinas, tanques de agua, suelos, paredes y cúpulas.
¿Húmedo o seco? Los métodos de aplicación son estos dos: la mezcla en seco (conocida como Gunita) y la mezcla húmeda.
Aunque, tanto el hormigón proyectado en húmedo como el seco tienen beneficios específicos, los avances en tecnología de materiales y equipos hacen que ambos procesos sean casi intercambiables. Normalmente, el método preferido está determinado por ciencias económicas, disponibilidad de material y equipo, el acceso al sitio y la experiencia y preferencia del contratista.
Si usamos el hormigón seco, tendremos la ventaja de poder ajustar el contenido de agua que se está poniendo en la mezcla en el momento, lo que permite un mejor proceso de colocación sin necesidad de agregar aceleradores. La mayor ventaja del proceso de mezcla en húmedo es, que los volúmenes más grandes se pueden colocar en menos tiempo.